Todo aquel que se meta en mi blog de vez en cuando o lo lea, que aunque sé que son pocos, algunos son, sabrá que normalmente no suelo hablar de cosas privadas de mi vida a no ser que pertenezcan a un ámbito muy publico de la misma, y al igual que este punto, no suelo hablar tampoco, porque no soy fan de ningún programita casposo de actualidad o reality shows, pero en esta ocasión tengo que saltarme esa norma y comentar lo que anoche pasó en Operación Triunfo. Asistimos al bochornoso espectáculo del guillotinamiento del buen gusto televisivo.
El espectáculo vergonzoso, aterrador y bochornoso al que anoche asistimos, me hizo pasar una de las peores noches, como espectador de este programa que soy desde sus comienzos, debido a la vergüenza ajena que me produjo la humillación y apaleo al que se sometió a Virginia, la ganadora de OT 2008, la ganadora por méritos propios, sean los que sean, y no me refiero a como dijo Cocó, esa desconocida, al hecho de que se abra mucho de piernas.
Estaba cantado, y es que el efecto rebote de televisión es así, si alguien cae mal en un programa o no lo hace lo suficientemente bien, y se le humilla por ello, los espectadores reaccionamos siempre de la misma forma, elevando a los humillados a los primeros puestos. Y eso lo que ha pasado en esta ocasión.
Virginia no ha ganado por el hecho de que cante bien, de hecho no canta bien, podría llegarlo a conseguir si comienza su carrera fuera de OT, o si OT no fuera un programa de Telecinco. Virginia le debe mucho de su éxito a RIsto Mejide, pero no todo, porque ella es de estas personas que por su fragilidad y personalidad, nos causan ternura y nos resultan entrañables, y por eso nos cuesta poco protegerla, porque las personas así, causan empatía y nos produce una sensación de placer el hecho poder protegerlas, y eso los psicólogos que están en los casting y que se encargan de hacer ricas a las productoras lo saben.
Por otro lado, la supuesta historia de amor entre Risto y Virginia a jugado a su favor también, porque las audiencias lo pedían, y ellas son las reinas y señoras de todo. Si Risto y Virginia se han liado, pues genial, me parece genial, y eso no debería importarnos en absoluto, pero desde la dirección de Telecinco y lo que es peor, desde la dirección de la academia, aquella que imparte sus clases magistrales desde el insulto, el histrionismo, lo soez y la mala educación, la docencia ridícula y lo que es peor el engaño, dirigida por el ser más ridículo de la televisión Ángel Llacer, decidieron dar rienda suelta al morbo, el insulto y la manipulación, no solo de los porcentajes de votaciones, también de las opiniones.
Risto comenzó una campaña por un producto que él consideraba bueno, y en esa empresa puede que se enamorara, que le gustara o que realizara la pantomima, para añadir más morbo a sus afilados comentarios y que eso elevara el interés del público por escuchar sus, en muchas ocasiones, absurdas opiniones. Virginia no es más que la víctima de las mentes perversas de Josep María Mainat, Tinet Rubira y demás señores que desde la sombra manejan los hilos de lo que sucede en el programa.
Pero a lo que voy no es al entramado empresarial, comercial de los reality shows de televisión, lo que más vergüenza ajena me produjo anoche es el comportamiento que tuvieron los concursantes de OT, compañeros de Virginia durante, creo que cuatro meses, y supuestamente amigos.
El hecho de que Virginia no fuera objetivo de los comentarios afilados de la lengua viperina, por la protección de su ”amor” o el saber comercial de Risto, despertó en ellos, la envidia, la ira, una falsedad y una violencia desmesuradas hacia la frágil persona y frágil personalidad de Virginia, sometiendo a esta a una humillación muy dolorosa, durante todo el programa pero en especial en la final de anoche.
Me pareció insultante la actitud de todos, ya que no animaron durante ningún momento a Virginia, y sí a Pablo lo cual no les resta razón ante su opinión de que éste debería de ser el ganador de OT, pero sí les resta credibilidad y les perfila como una panda de sinvergüenzas, sin educación ninguna. Pero en especial a tres de ellos, Iván, Mimi y Sandra, que se despacharon agusto.
De Iván solo puedo decir, que afortunadamente, vivirá algún momento de gloria como colaborador de algún programa casposo y amarillo, y no le auguro más futuro que el de presentador de algún programa nocturno de estos a los que los incautos llaman para ganar un dinerito extra. Su histrionismo, amaneradas maneras, su incultura y su mala educación, hacen de esta persona un claro ejemplo a no imitar. Espero y deseo que la cadena “enemiga”, de buen gusto, del respeto y de la buena televisión, no convierta a este fracasado cantante de musicales, en un personaje que aparezca frecuentemente en nuestros televisores, y mucho menos que alguien llegue a pensar, que esta mariquita mala, desvergonzada, absurda y plumífera repugnante, pueda ni si quiera por un momento, representar a la comunidad homosexual.
Mimi, su presencia en el escenario es impresionante, esta buena, es guapa y no canta del todo mal, pero sus aptitudes como persona son nulas, al menos es lo que ha dado a entender como concursante de OT, paleta, cateta y chica fácil... fácil de manipular ya que al principio parecía una buena persona, pero las malas artes de los profesores de la academia, y las malas compañías de Iván y Cía., han hecho que esta concursante sea el ejemplo triste de que siendo guapa se pueden conseguir más cosas que siendo inteligente, fue Miss fotogenia en el concurso de Miss Sevilla 2003, lo cual confirma mi teoría.
Sandra, el mal gusto personificado, sin lugar a dudas... basta, barriiobajera, inculta y con un grave problema de dicción, no sabe hablar ni pronunciar bien dos palabras seguidas, soberbia, envidiosa e injusta, maleducada y encima fea, vamos que lo tiene todo para ser una ejemplar María Magdalena, pero no en el escenario, más bien en la vida real. No sé en que coño estaban pensando los productores de Jesucristo Superstar, para buscar actores en OT, pero mucho menos entiendo que consideraran a Sandra como una óptima candidata para representar tan digno e increíble papel encima de un escenario.
Espero que no vaya ni el tato a verla, o que sea una actriz extra por si la primera se pone mala, de verdad que Dios le da pan a quien no tiene hambre.
Anoche esta última y basta concursante, hizo gala de que su soberbia puede más que su inmensa y a la vez pésima educación, pronunciándose tremendamente mal, ante el abandono de Risto del plató.
Por cierto, si yo fuera Risto, también lo hubiera abandonado, porque desde hace semanas sabíamos que Virginia ganaría el concurso, y que la humillación publica de sus compañeros iba a ser inminente, y un duro impacto que aguantar. La vergüenza ajena que la situación nos produjo a muchos, ver el bochornoso espectáculo de anoche, y mirar en la tele, como Virginia una vez que fue proclamada ganadora, el único abrazo de felicitación que encontró fue el de Mónica Naranjo y el de sus padres... era evidente que la envidia y la soberbia de sus compañeros, convirtieron el triunfo democrático de Virginia en un trago amargo, para Risto que no quiso estar presente, para los padres de Virginia y para la propia Virginia que aguantó elegante e históicamente el bochorno de su triunfo.
Para mi no es la mejor, pero se merece el triunfo por lo que ha aguantado dentro de los muros de una academia, hortera y que cuya misión no es enseñar, más bien crear espectáculo y falsas esperanzas a quienes desde casa, sueñan alguna vez con una oportunidad similar, de cantar o bailar, o desempeñar cualquier disciplina artística... esto último lo digo por el otro programa en la que Noemí “imparcial” Galera es una cazatalentos tan patética como Ángel Llacer.
Si tanta indignación produce que gane un programa de estas características, una persona que creemos que no vale, o que aún está por terminar de hervir... no participéis, no permitamos que se aliente un formato que no valora el valor, que malforma la actitud del triunfo, y que humilla (Esther, Idaira... ) a quien no piensa como las masas. Esto es una aristocracia en forma de democracia, unos deciden lo que gana, lo que se emite, lo que se oye y los demás nos creemos con voto por disponer del 5557 para opinar... que solo es un “sacacuartos”. Pues si nos dan la posibilidad de opinar, seamos tolerantes con las opiniones, pero ante todo, tengamos educación. Estoy pensando seriamente en desintonizar Telecinco de mi pantalla de cataplasma, no te digo más...
Desde mi punto de vista, tendría que haber ganado Pablo, puesto que Chipper siempre jugó con mucha ventaja dentro del concurso, pero estoy contento de que Virginia, lo hiciera, porque, aunque no lo justifico, bien vale aguantar una humillación de estas características, por 250.000 €. Pablo ya va ha ganar bastante con los derechos de autor que el hortera tema Agua, que ya tenia compuesto y pensado estrenar dentro de OT, le va a proporcionar... en definitiva en España somos así de horteras, el temita está número uno de ventas. Vivir para escuchar.
A más ver.
Joserra
...
2 comentarios:
Nada que añadir.
Bueno, si .... la web de risto mejide lleva caída desde anoche, jajaja. Creo que en este momento es el personaje más buscado del país
Pues a mi me gustaba Chiper, me encanta su voz, me gusta... y eso de que quedara tercero...
Virginia me da igual.. creo que si lo hubiera pasado tan mal se habria visto mas.. o simplemente te vas.. a no ser que sepas que el apoyo que tienes de Risto va a hacer que ganes o simplemente es algo que te veneficia... el resto.. pues mas triunfitos para llenar el martes por la noche
Un beso grandeee
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